Cómo hacer tarta de queso casera al estilo Frankie Burgers

Si hay un día dulce y que bien merece ser disfrutado en el calendario es el 30 de julio: Día Mundial de la Tarta de Queso.

La tarta de queso gusta tanto a niños como a mayores y enamora incluso a los que no son amantes del queso. Tartas de queso semilíquidas, inspiradas en la receta americana de la cheesecake, más vanguardistas; más dulce o más salada, algunas pasan por el horno, mientras que otras se elaboran y sirven en frío… Y luego está nuestra tarta Frankie. No lo decimos nosotros, lo dicen nuestros clientes: la tarta de queso de Frankie Burgers es irresistible.

Y por eso hoy hablamos de este postre que levanta pasiones y compartimos en este post los secretos de nuestra receta para preparar una auténtica tarta de queso casera. Recuerda: no hay una única receta de la tarta de queso, hay tantas como quesos…

Receta para elaborar una tarta de queso casera

Nuestra tarta de queso se distingue por su increíblemente cremosa textura y su equilibrio perfecto entre dulzura y acidez. Cada bocado es una experiencia deliciosa que despierta los sentidos y deja un inolvidable sabor en el paladar.

La tarta de queso de Frankie Burgers es una combinación perfecta de ingredientes de calidad, mezclados con precisión para lograr una consistencia suave y sedosa. La receta secreta y el cuidado en su preparación hacen que nuestra tarta de queso sea única y memorable.

¡Compartimos contigo cómo la elaboran nuestros compañeros de cocina!

Ingredientes para hacer una tarta de queso casera

• Queso Mascarpone
• Queso Philadelphia
• Nata líquida
• Huevos
• Azúcar
• Mantequilla
• Galletas

Trucos para una tarta de queso casera de escándalo como la Frankie Burgers

He aquí algunos trucos para elaborar una tarta de queso perfecta:

• Utiliza queso de calidad: En Frankie Burgers utilizamos ingredientes frescos y de alta calidad en todas nuestras burgers, y la tarta de queso no es una excepción. El queso utilizado es seleccionado cuidadosamente para garantizar un sabor excepcional, mientras que los ingredientes adicionales se utilizan en cantidades justas para realzar los sabores sin abrumarlos. Nosotros optamos por el queso mascarpone, un queso clásico italiano, con una textura cremosa y suave que lo hace ideal para hacer postres. Además, añadimos queso Philadelphia, un queso crema con mucha untuosidad con el que podemos lograr la estructura deseada, sin grumos y es un queso de sabor suave. Emplea ambos quesos en la elaboración a temperatura ambiente, para que sea más fácil mezclarlos con el resto de ingredientes.
• Asegúrate de que los ingredientes estén a temperatura ambiente para lograr una mezcla homogénea y evitar grumos.
• No mezcles en exceso: Al combinar los ingredientes, mezcla solo lo suficiente para obtener una mezcla uniforme.
• Hornea la tarta de queso a una temperatura baja y durante un tiempo prolongado. Esto ayudará a obtener una textura cremosa y evitará que se agriete. Y evita abrir el horno durante el cocinado.
• Deja enfriar gradualmente para obtener la mejor textura y sabor.

Elaboración de la tarta de queso

¡Manos a la obra! 

1. Antes de comenzar con los procesos de elaboración de la base y el relleno, precalienta el horno a 210ºC.
2. Utiliza un molde de paredes altas y base desmontable forrado con papel sulfurizado ligeramente humedecido.
3. Para la base de la tarta de queso, tritura las galletas (puedes usar al estilo María); derrite la mantequilla en el microondas y mezcla con las galletas trituradas. Esto añade un toque crujiente y un contraste de sabores que eleva aún más la experiencia gastronómica.
4. Extiende la mezcla sobre el molde hasta conseguir una base firme y uniforme. Reserva el en el frigorífico.
5. Para el relleno, mezcla el queso mascarpone, el queso crema Philadelphia, el azúcar y los huevos en un bol, removiendo hasta homogeneizar.  Por último, incorporamos la nata líquida y mezclamos.
6. Rellenamos el molde e introducimos la tarta de queso en el horno a 180ºC, con calor arriba y abajo, durante 40-50 minutos. Antes de servir, dejar reposar para que la tarta se enfríe unas 4 o 5h. 

¡Y a disfrutar!

Puedes servirla acompañando unos frutos rojos o un helado artesanal o, solamente, la tarta de queso. Sea cuál sea tu opción, ¡será deliciosa!

La tarta de queso, un postre que hay que probar al menos una vez en la vida

La tarta de queso o cheesecake es un clásico en las cartas de postres de los restaurantes. Siempre apetece degustar y, como no hay dos iguales, siempre apetece también comparar entre diferentes para descubrir cuál nos enamora más. 

El origen de la tarta de queso se remonta a la Antigua Grecia (los deportistas del año 776 a.C. la añadían a su dieta por la energía que les aportaba). 

Fueron los romanos, cuando conquistaron los territorios griegos, los que elevaron la tarta de queso a un manjar que sólo se servía en ocasiones muy especiales y, según fueron conquistando territorios, extendieron la receta a todos los países de Europa. De esta manera, a lo largo de los siglos, la elaboración se ha ido modificando y personalizando con los gustos y la cocina autóctona. En el siglo XVIII, la tarta de queso llegó a Estados Unidos. Desde entonces no existe cafetería norteamericana donde no se sirva la clásica cheesecake neoyorquina. 

Y en la actualidad, en cada país, la receta se elabora de una manera, empleando quesos diferentes, con base de galleta o sin ella; con un toque salado y ligeramente tostado… Elijas la receta que elijas, la tarta de queso es un postre que nunca decepciona. Es dulce, cremosa y, además, fácil de preparar. 

En España el origen de las tartas de queso puede encontrarse en el norte, sobre todo en la quesada pasiega de Cantabria, que originariamente se hacía con leche de vaca cuajada, mantequilla, huevos y harina.